Cada vez es más frecuente que muchos de nosotros trabajemos de manera independiente, trabajar freelance se ha vuelto una gran tendencia en los últimos años. Trabajar desde casa, sin preocupaciones, las miraditas tensas con los jefes o el mood de oficina que a muchos nos aburre, son las cosas a las que queremos decirle ¡adiós para siempre!
¿Pero realmente es tan mágico como un unicornio? Si quieres ser freelance, antes de aventarte a hacerlo improvisadamente, hay varias cositas que tienes que saber financieramente sí o sí para que no termines ¡volviéndote loco!
La verdad es que ser freelance tiene grandes ventajas que todos sabemos, ¿no? Tener libertad para trabajar de la manera que se te antoje, el límite de la carga de trabajo tú la estableces, así como las fechas de entregas. ¡Peeero, aunque suena muy lindo todo esto, tiene su lado oscuro!
¡Para que freelancees de la mejor manera sin perder la cabeza y que los impuestos NO terminen volviéndose una verdadera pesadilla, estas son las cosas que debes saber!
1. ¿Trabajar Freelance es lo tuyo?
Ser freelance no es para cualquiera, requiere de las mejores habilidades personales y de trabajo para que rompas barreras. Lo más importante es tener DISCIPLINA.
¡Pfff! Sí, ya sabemos que suena a regaño de mamá, pero la base de un freelance se basa en esto. ¡Eres tu propio jefe y tienes que estar organizado! Nada de procrastinar viendo Netflix o Instagram, si quieres vivir de esto tendrás que controlarte. ¡Que la fuerza te acompañe!
2. ¿No llegas a fin de mes?
¡Ojo! Este es el segundo punto en el que debes enfocarte porque hará que sobrevivas al freelanceo. Todos hemos escuchado el típico: no hay chamba, apenas con 3 proyectos podré pagar la renta o me quedé sin un quinto. ¡Verdaderas historias de terror!
Si este ha sido tu caso o el de alguno de tus amigos, necesitan abrir los ojos a sus finanzas. La clave está en analizar cuáles son tus gastos mensuales y con cuánta carga de trabajo alcanzas a cubrirlos, no te quedes conformes con menos trabajo o busca clientes leales que sean tu base económica.
3. ¡Domina los impuestos!
Los impuestos, un tema tan sonado en el mundo del freelance. No es para menos, ya que si no te informas bien, ¡puedes salir perdiendo!
El primer paso es darte de alta en el SAT como persona física, ya que le estarás ofreciendo tus servicios a otras empresas. Una vez registrado, te ayudarán a crear tu firma electrónica, conocida como: e.firma y FIEL.
Después, es importante que recuerdes que el régimen fiscal que te corresponde es el de “servicios profesionales”. Además de esto, el SAT indica que los freelances / honorarios tienen que disponer el 10% de su sueldo, a lo que se le conoce como ISR. ¡No te estreses, no es tan complicado como parece!
Lo último que tienes que saber y que no se te puede olvidar por nada del mundo es hacer tus deducciones, ya que te ayudaran a disminuir tus ingresos. Las que puedes deducir son aquellas actividades que tú como freelance necesitas para desempeñar tu trabajo. Súper, ¿no?
Algunos de ellas son: equipo de oficina, accesorios de tu equipo o software de trabajo, papelería, gasolina, taxis, en fin, una gran cantidad de cosas que te pueden ayudar a pagar menos.
¡El freelance es el futuro laboral de muchos millennials y centennials! Date un break de la ofi y prueba esta creativa manera de trabajo, supera el reto. Si quieres leer más artículos relacionados no te pierdas más contenido en nuestro Blog.